¿Y ahora qué?
Ya está. Los catalanes han votado y no ha habido sorpesas. CiU ha ganado sin mayoría absoluta, el PSC ha caído considerablemente (5 escaños) y en menor medida lo han hecho ERC (2 escaños) y el PP (1 escaño). ICV ha salido bien parada de los comicios, con un ascenso de tres escaños, y la recientemente creada Ciutadans-Partit de la Ciutadania irrumpe en el parlamento con otros tres diputados.
Revisado, pues, el nuevo panorama político catalán, es la hora de buscar razones y justificaciones varias a los éxitos/fracasos cosechados por las distintas formaciones y de hacer conjeturas. Es la hora del ¿y ahora qué?
A nadie se le escapa que, excepto fenómeno paranormal, el PSC se va a meter en el gobierno de Cataluña. A sus socios aún no los conocemos (lo único cierto es que podemos descartar a los partidos constitucionalistas, esto es, a los no separatistas). Todo parece indicar que desde Moncloa se prefiere a CiU como aliado (por eso de que Mas fue el principal apoyo para la aprobación del Estatut y su imagen y la de su partido no venden tanto radicalismo como la ERC de Roviretxe). Sin embargo, la reedición del truculento tripartito es la opción preferida por la sección catalana del PSOE, que viene funcionando, en la práctica, como una formación independiente y que (pese al cambio de líder) seguirá entrando en contradicción con las directrices recibidas de su matriz cuando éstas se aparten del más descerebrado separatismo izquierdista. Las declaraciones que en estos días estamos presenciando, como las de los señores Bono y Chaves (que se dan cuenta ahora de que el tripartito no les gustaba) buscan ejercer presión sobre los líderes del PSC y "orientarles" en su búsqueda de aliados. Aunque así lo espero (más vale malo que desastroso, cuando ya se conocen ambas opciones), no creo que consigan hacerse oír... Ya veremos
Revisado, pues, el nuevo panorama político catalán, es la hora de buscar razones y justificaciones varias a los éxitos/fracasos cosechados por las distintas formaciones y de hacer conjeturas. Es la hora del ¿y ahora qué?
A nadie se le escapa que, excepto fenómeno paranormal, el PSC se va a meter en el gobierno de Cataluña. A sus socios aún no los conocemos (lo único cierto es que podemos descartar a los partidos constitucionalistas, esto es, a los no separatistas). Todo parece indicar que desde Moncloa se prefiere a CiU como aliado (por eso de que Mas fue el principal apoyo para la aprobación del Estatut y su imagen y la de su partido no venden tanto radicalismo como la ERC de Roviretxe). Sin embargo, la reedición del truculento tripartito es la opción preferida por la sección catalana del PSOE, que viene funcionando, en la práctica, como una formación independiente y que (pese al cambio de líder) seguirá entrando en contradicción con las directrices recibidas de su matriz cuando éstas se aparten del más descerebrado separatismo izquierdista. Las declaraciones que en estos días estamos presenciando, como las de los señores Bono y Chaves (que se dan cuenta ahora de que el tripartito no les gustaba) buscan ejercer presión sobre los líderes del PSC y "orientarles" en su búsqueda de aliados. Aunque así lo espero (más vale malo que desastroso, cuando ya se conocen ambas opciones), no creo que consigan hacerse oír... Ya veremos
posted by Inkisitor @ 00:09
3 Comments:
El tripartirto es lo que más nos puede beneficiar a los huerfanos militantes de la Derecha.
Un Gobierno CiU-ERC sería la más dañina de todas las opciones, ya que se juntaría el hambre con las ganas de comer. Empezarían a pelearse Mas y Carod por presentarse ante el electorado como los más nacionalistas, lo que subiría el listón de la tontuna exponencialmente. Descartado.
Quedan la sociovergencia y el tripartit. Nos beneficia más el govern d'endesa, digo... d'entesa porque deja a CiU libre y resentida. Con un pacto de gobierno entre PSC y CiU lo único que se habría asegurado es un respaldo perpetuo a las políticas zapateriles y, sobre todo, apoyo tras las elecciones de 2008. Con lo cual el PP tenía dos posibles futuros: mayoría absoluta u oposición perpetua. Pero con el tripartit hay esperanza. Con un Mas resentido, el apoyo al PP tras las próximas generales es aún posible, difícil, pero creo que estamos más cerca que antes.
Habrá quien me critique por dejar a los catalanes a su suerte, pero ellos se lo han ganado. Se merecen tener a Montilla como presdiente, me parece un caso claro de justicia poética. Igual que nos mereceremos los gallegos un Pepiño presidente de la Xunta si seguimos con tonterías como lo de la Nación de Breogán...
Y, por último, Ciutadans. Debo reconocer que pensaba que le quitaría muchos votos al PP y parece ser que no, se ha llevado un puñado pero su cantera diríase que está los que se abstienen de votar e incluso en la izquierda clásica. Tal vez... puede ser... es posible... hay probabilidades... si se alinean los planetas... podría haber en 2008 un Ciudadanos en el Congreso que se coaligue con el PP para formar Gobierno y parar así la máquina de concesiones a los nacionalistas en la que se ha convertido el ¿P?¿S?¿O?¿¿E??
Todavía hay Esperanza 8-)
Aunque admito que a priori un nuevo gobierno tripartito sería beneficioso para los intereses electorales del PP, (más por el descontento de CiU que por la pérdida de votos que se produciría en el PSOE, lo que me parece bastante improbable), sigo manteniendo que, de entre las opciones posibles, muy probablemente la mejor para España habría sido CiU-PSC. Y lo del hipotético apoyo de los conservadores catalanistas al PP en las generales... Con Mas (el hombre ante-notario) al frente de CiU y los complejos de los catalanes, se me antoja una quimera. En fin, como tú dices, a ver qué pasa con Ciutadans.
Con un pacto CIU-PSC no habría posibilidad alguna de que CIU apoyase al PP en 2008. Pero ahora no digo que vaya a pasar, sino que es probable.
La payasada del notario lo hizo Mas para sumarse al carro de los que gritan "¡fachas!", pero estando Mas sin cargo en la Generalitat andará deseoso de poder. Sobre todo para luego presentarse en Barcelona como el que ha arrancado del Gobierno central -del PSOE o del PP- pactos que beneficien a Cataluña.
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